Si quieres saber cómo eliminar las cucarachas de casa, en primer lugar ni te plantees lanzar una bomba atómica. Vale, vale, es el clásico remedio que a todos se nos ocurre en primer lugar, pero ya sabes que dicen que estos insectos serían los únicos que sobrevivirían a un holocausto nuclear, como lo hicieron en Hiroshima y Nagasaki. Esto es debido a que son capaces de resistir muy altas cantidades de radiación.
Pero tranquilo, no te preocupes, que aunque parezca paradójico, hay maneras mucho más fáciles de acabar con ellas. Por ejemplo, nuestros servicios de limpieza y de conserjería. Aunque también puedes probar unos cuantos trucos caseros para lidiar con tan resistentes, crujientes y, claro, asquerosetes bichos. Por qué no decirlo. Te vamos a sugerir varios.
Conociendo a las cucarachas
Quizá no nos apetezca acercarnos mucho a ellas, porque las cucarachas son desagradables, esto es así. Si al menos tuvieran un grupo legendario a su nombre, como los escarabajos, quizá las apreciaríamos algo más, pero nada, que no hay manera de tenerles algo de simpatía. Pero ya sabes que siempre hay que conocer al enemigo para combatirle mejor.
Las cucarachas son bastante pendencieras, ya que son animales nocturnos, por eso lo más probable es que te las encuentres en la oscuridad. Y eso si te las encuentras, porque son muy evasivas, no les gusta demasiado ser vistas mientras andan en busca de comida. ¿Qué comida? De todo. Digamos que no son de paladar fino precisamente, pues comen casi cualquier resto orgánico: les encanta el dulce, la carne y la grasa, pero incluso otras cucarachas en descomposición les sirven.
Tampoco son muy exquisitas con su alojamiento. Es más, cuanto más húmedo y oscuro sea, mejor que mejor. Por eso suelen hospedarse en grietas de la pared, huecos entre los muebles del baño o la cocina y ese tipo de sitios agradables en los que se combina almacenaje de comida, humedad, oscuridad y poco movimiento de gente. Además, se reproducen a una velocidad endiablada, pudiendo poner en 3 o 4 meses que dura su vida 1 millón de huevos. Por eso hay que tener mucho cuidado con ellas, ya que son muy poco higiénicas y transmiten varias enfermedades.
¿Cómo acabar con las cucarachas?
Hojas de laurel: Pues así es. No sabemos muy bien si es que tienen algún tipo de fobia a los césares de la antigua Roma, pero parece que el olor de las hojas de laurel les repele totalmente. No hace falta que utilices una corona completa, bastará con una hoja entera sobre un papel y eso debería mantener a las cucarachas lejos de tu casa. Haz lo mismo en varios lugares de casa por los que sospechas que se podrían estar colando, colocando diversas hojas que actuarán como barrera olorífica. La lavanda también sirve.
Solución de agua y jabón: Si han conseguido penetrar tu fortificación, también puedes acabar con ellas directamente. Este es un método indicado para acribillar a esas cucarachas exploradoras que osan mostrarse a la vista, sin reparos. Mezcla un simple jabón de manos con agua y ponlo en un bote pulverizador (flis flis de toda la vida). Cuando veas a una cucaracha rocíala con el espray y verás cómo se retuerce. Esto ocurre porque la solución crea una capa que tapa sus poros, por lo que se asfixiará. Así es fácil fumigar cucarachas a diestro y siniestro.
Trampas pegajosas: Aquí hay que admitir que las cucarachas son bastante parecidas a nosotros. No, no, no físicamente, pero sí en el sentido de fáciles de tentar. Ya hemos dicho que sienten predilección por el dulce, por lo que nos será muy fácil atraerlas a alguna trampa con un poco de azúcar, como decía Mary Poppins. Les encanta posarse en el papel, en el cartón o la madera, así que bastará con poner sobre uno de esos materiales un poco de azúcar, pegamento o algún adhesivo potente, colocarlos de nuevo en esos puntos estratégicos y esperar a que caigan como mosc…CUCARACHAS.
Ácido bórico: Técnica parecida a la anterior, sólo que esta vez no sólo las atraparás, sino que también envenenarás a las cucharachas. El ácido bórico se puede comprar en farmacias y consigue acabar con los insectos taponando sus vías de evacuación. De esta manera, al poco tiempo de ingerirlo estallan, literalmente. ¿Cómo hacer que tomen estos polvos? Muy fácil, mezclándolos con azúcar de nuevo y dejándolo en boles situados estratégicamente por la casa.
Usa la aspiradora: Mira que parece fácil… ¡y lo es! Su efectividad radica en su sencillez. Aunque no sirve tanto para aspirar a los bichos directamente, sino más bien para limpiar allá donde se hospedan y dejan sus huevos, que, como hemos dicho, son muchos. Esta es una medida muy recomendable para compatibilizar con las demás, ya que por un lado atacas a las cucarachas en sí y también a las futuras amenazas.