Si hablamos sobre cuáles son las plagas más comunes en un edificio, podemos incluir en la lista a las cucarachas, avispas, hormigas, arañas, moscas, ratones y ratas, termitas o palomas entre las plagas más frecuentes encontradas en zonas comunes de edificios del mismo modo que en locales, oficinas y viviendas particulares.
¿Cuáles son las plagas más comunes?
Al hablar del entorno urbano, vemos que tanto los edificios como los complejos residenciales son una de las zonas con mayor riesgo en la posible aparición y asentamiento de distintas plagas, que si no son controladas, podría suponer una importante amenaza atentando a la salud tanto de vecinos, como niños y ancianos y hasta incluso de los animales domésticos.
En este tipo de espacios hay algunas zonas que exigen una mayor vigilancia. Éstas pueden ser garajes, trasteros y cuartos de basuras. Del mismo modo, las viviendas cada vez cuentan con mayor número de zonas comunes y de recreo que necesitan aumentar la prevención frente a posibles peligros derivados de plagas. Las plagas tanto de cucarachas, como hormigas, avispas, moscas, arañas, ratas y ratones, palomas, o termitas son las más comunes en las zonas compartidas de los edificios como en las viviendas particulares, locales u oficinas.
¿Cuáles son los daños?
Si hablamos de los daños ocasionados por las plagas más comunes, vemos que las plagas de ratas y ratones pueden transmitir al entorno enfermedades como son la salmonelosis, la leptospirosis, el tifus, neumonías, sus mordeduras pueden producir fiebres y diarreas. En el caso de insectos, pueden transmitir diferentes enfermedades dependiendo del vector que las provoque. Las transmisoras de enfermedades como la disentería o salmonelosis son las moscas y cucarachas y las hormigas contaminan los alimentos. Desde un punto de vista sanitario, las palomas, portan organismos patógenos capaces de transmitir diversas enfermedades como: salmonelosis, histoplasmosis, ornitosis o criptococosis, además de ser hospederos de ectoparásitos como garrapatas, ácaros y mosca de la paloma.
En cuanto a daños económicos y estructurales que pueden ser provocados por las plagas son también significativos. Las pérdidas económicas provocadas por la aparición de termitas en edificios se cuantifican, anualmente, en millones de euros.
Para evitar que evitar la aparición de plagas es recomendable a los administradores de fincas, mantener este tipo de espacios en buenas condiciones higiénico-sanitarias y contar con la ayuda de profesionales como nosotros de cara a prevenir, erradicar y controlar la población de estos organismos dañinos que puedan ser un riesgo tanto para la salud como un problema económico grande.